Observo a mi madrastra en secreto mientras tiene un orgasmo en el sofá de la sala

Yo me quedé recostado en el sillón cuando vi a mi voluptuosa figura por las cortinas.Su deliciosa, de ébano derriere era un espectáculo para los doloridos ojos.Decidí observar a escondidas como ella se daba placer en el sofá de la sala.Mientras observaba en silencio, ella empezó a gemir de éxtasis, su cuerpo convulsionaba del placer.Sus dedos bailaban sobre su cuerpo, rastreando un camino de deseo que me dejaba sin aliento.La vista de ella, una diosa de ébono de la pasión, era intoxicante.Sus curvas, su piel, su sexualidad cruda -era demasiado para que me resistiera.Me encontraba perdido en el ritmo de su placer, mi excitación creciendo con cada gemido.Mientra llegaba a su clímax, su cuerpo se estremecía con la intensidad de su orgasmo.Quedé sin aliento, mi deseo se intensificó con la vista de ella por la garganta de la pasión.Era un momento privado, un vistazo a su mundo de placer, que me dejó cambiado para siempre.