Hombre de mediana edad se masturba en lencería de la casa de los vecinos

Después de un largo día de trabajo, nuestro protagonista de mediana edad decide desenrollarse dándose placer con su pasión secreta.Se dirige a la casa de su vecino, donde ha estado albergando una obsesión traviesa por su colección de lencería.El atractivo tentador de las prendas íntimas de seda y encaje es demasiado para resistirse, y no puede evitar resbalarse en un par de las provocativas tangas.La emoción del prohibido, unido a la tela suave contra su piel, envía una prisa de deseo desplazándose a través de él.Sus manos encuentran su camino hacia sus pantalones, y comienza a darse placer, la vista de sus nalgas desnudas enfundadas en la vibrante lencería que agudiza su excitación.Al llegar al pico de éxtasis, libera su carga, su caliente semen manchando el delicado material de la tanga.La vista de su clímax goteando desde la tangas es el extremo perfecto de su traviesa escapada.